Muchos ya lo habrán notado y es que mi amistad con el sexo opuesto siempre ha sido más productiva y duradera que con mis colegas las siempre tan sufridas, nosotras, las tan complejas pero irresistiblemente atractivas MUJERES.
Y es que ayer durante una charla, de esas, siempre tan lindas, que sostengo con mi, no menos, lindo y además muy querido Jhon o ¡Juanito! ... como te dirían muchas españolas... discutimos acerca del por qué un hombre se aproxima a una mujer. De acuerdo a él, la respuesta es única: Definitivamente atracción "Un hombre busca algo más". Afirmación a la que asciento con una ceja algo levantada.. ¡sí, sí la izquierda! y es que claro es muy probable pero no definitivo y no voy empezar con una encuesta a todo aquel amigo mío... o tampoco preguntar a cada ex pareja, si algo de eso percibió en la atmosfera, cada vez que decía "voy a salir con un amigo".
El caso es que definitivamente mi relación con el sexo opuesto va más alla de atracciones superfluas. Y es que encuentro que la confianza y la retroalimentación van en doble dirección todo el tiempo. Ahora, muy aparte de todo, les debo confesar que, la que más aprovecha esta especie de simbiosis es la que escribe.
Y si se ponen a pensar ¿Ustedes tienen idea de la cantidad de cosas que podemos aprender a su lado? Pues a ver, yo siendo una mujer de 30 años (duele tan sólo buscar la tecla con el número tres) soltera y con muchos amigos (hombres y mujeres) con relaciones bastante comprometidas y claro en esa etapa impostergable de "evaluación y elección" con citas y encuentros y desencuentros con el sexo opuesto, es mucho más que obvio que necesito saber que llevan aquellos marcianos en la cabeza. Y ¡¡no!! no me basta con "Los hombres son de marte y las mujeres son de venus" para terminarlos de comprender al 100%. ¿Y nos llaman a nosotros "las complicadas"? La verdad es simple, y es que Nunca seremos iguales y jamás pretendamos encontrarnos con uno que nos sepa dar lo que necesitamos y sepa leernos el pensamiento ¡¡¡IMPOSIBLE!!! somos de diferente concepción, somos de otra especie.... y lo asimilamos o nos quedamos solas o con compañeros gays o simplemente nos colgamos de aquella llamada revolución bisexual u homosexual (y es que cada día son más los que salen desesperados a gritar su opción alterna o verdadera) ... que va, tan desesperada no estoy y no lo puedo negar ¡¡¡Vivo eternamente enamorada de los hombres!!!
Pero vayamos al grano, ¿Qué pasa con mi amistad con el sexo opuesto? Pues NADA, es lo más normal y es divertido y fascinante saber como piensan, como sienten... Sin contar que, claro, respentando sus condiciones, puedes llamarlos a cualquier hora (dependiendo de la hora en que te rompan el corazón) sólo para que simplemente te escuchen llorar... y díganme ustedes ¿Acaso no es increíble saber que puedes contar con ellos de esa forma? y saber que un hombre sabe elegir los insultos e improperios para aquellos de su misma especie de manera, irónicamente, acertada, es tambien ALENTADOR.
Lo lindo es que existe, si Juanito! ¡¡¡existe!!! Es posible una amistad entre un hombre y una mujer y la clave del asunto es ver a ese, a aquel amigo, como una mujer más y que este último lo vea de la misma forma que tú. A tal punto que si van por la calle y se cruza una chica por el camino, tu amigo te codee y te diga ¡Que buen .....! como si su interlocutora llevara las mismas hormonas que él. Estimado(a) lector(a) si han llegado a este nivel... Usted tiene un amigo del sexo opuesto.
nAT
Abril 07
Lima, Perú
Y es que ayer durante una charla, de esas, siempre tan lindas, que sostengo con mi, no menos, lindo y además muy querido Jhon o ¡Juanito! ... como te dirían muchas españolas... discutimos acerca del por qué un hombre se aproxima a una mujer. De acuerdo a él, la respuesta es única: Definitivamente atracción "Un hombre busca algo más". Afirmación a la que asciento con una ceja algo levantada.. ¡sí, sí la izquierda! y es que claro es muy probable pero no definitivo y no voy empezar con una encuesta a todo aquel amigo mío... o tampoco preguntar a cada ex pareja, si algo de eso percibió en la atmosfera, cada vez que decía "voy a salir con un amigo".
El caso es que definitivamente mi relación con el sexo opuesto va más alla de atracciones superfluas. Y es que encuentro que la confianza y la retroalimentación van en doble dirección todo el tiempo. Ahora, muy aparte de todo, les debo confesar que, la que más aprovecha esta especie de simbiosis es la que escribe.
Y si se ponen a pensar ¿Ustedes tienen idea de la cantidad de cosas que podemos aprender a su lado? Pues a ver, yo siendo una mujer de 30 años (duele tan sólo buscar la tecla con el número tres) soltera y con muchos amigos (hombres y mujeres) con relaciones bastante comprometidas y claro en esa etapa impostergable de "evaluación y elección" con citas y encuentros y desencuentros con el sexo opuesto, es mucho más que obvio que necesito saber que llevan aquellos marcianos en la cabeza. Y ¡¡no!! no me basta con "Los hombres son de marte y las mujeres son de venus" para terminarlos de comprender al 100%. ¿Y nos llaman a nosotros "las complicadas"? La verdad es simple, y es que Nunca seremos iguales y jamás pretendamos encontrarnos con uno que nos sepa dar lo que necesitamos y sepa leernos el pensamiento ¡¡¡IMPOSIBLE!!! somos de diferente concepción, somos de otra especie.... y lo asimilamos o nos quedamos solas o con compañeros gays o simplemente nos colgamos de aquella llamada revolución bisexual u homosexual (y es que cada día son más los que salen desesperados a gritar su opción alterna o verdadera) ... que va, tan desesperada no estoy y no lo puedo negar ¡¡¡Vivo eternamente enamorada de los hombres!!!
Pero vayamos al grano, ¿Qué pasa con mi amistad con el sexo opuesto? Pues NADA, es lo más normal y es divertido y fascinante saber como piensan, como sienten... Sin contar que, claro, respentando sus condiciones, puedes llamarlos a cualquier hora (dependiendo de la hora en que te rompan el corazón) sólo para que simplemente te escuchen llorar... y díganme ustedes ¿Acaso no es increíble saber que puedes contar con ellos de esa forma? y saber que un hombre sabe elegir los insultos e improperios para aquellos de su misma especie de manera, irónicamente, acertada, es tambien ALENTADOR.
Lo lindo es que existe, si Juanito! ¡¡¡existe!!! Es posible una amistad entre un hombre y una mujer y la clave del asunto es ver a ese, a aquel amigo, como una mujer más y que este último lo vea de la misma forma que tú. A tal punto que si van por la calle y se cruza una chica por el camino, tu amigo te codee y te diga ¡Que buen .....! como si su interlocutora llevara las mismas hormonas que él. Estimado(a) lector(a) si han llegado a este nivel... Usted tiene un amigo del sexo opuesto.
nAT
Abril 07
Lima, Perú