martes, 22 de julio de 2008

Una más

Decepción, claro está... algo ya me decía que quizás no me estaba equivocando... lo cierto es que decidí dejarlo de lado hace algún tiempo ya... sí, yo sé que lo declaré como el amor de mi vida, él único a quien amé y todo lo demás... (quizás me equivoqué...) y es que ¿porqué perder el tiempo con alguién que no es capaz de ponerse los pantalones?... es que el que evade hoy, evadirá mañana...

Como muchos ya sabrán "decidímos" ser amigos... y así en uno de esos momentos en que necesariamente el "amigo" hace falta llamó: "...necesito hablar..." no, no era nada fácil escuchar lo que estaba sucediendo... vaya noticia, poco digerible... él a miles de kilómetros de distancia de la persona que lo trajo al mundo, de la persona que poco tiempo asegurado le queda ya en el mismo, que ya ni lo recuerda .... ¿cuando vas? pregunté... No, no lo sé... no sé si ir... era como estar reviviendo esos nuestros últimos días, esos en los que abundaba la inseguridad, la depreción... el vacío. Nuevamente tenía tras el teléfono a aquél personaje de cuento para niños que ante cualquier obstáculo se esconde en su cueva a la espera de que pase la tempestad: típico cobarde sin madurez emocional.

El tema le costaba tanto, que decidió cambiarlo y de pronto contarme que tal había estado el concierto del día anterior... pensé... querrá distraérse...

Jamás imaginé (sí, debo admitirlo... se me cruzaba por la mente) que esa evación cobraría grandes magnitudes... "... Nosé si ir, quizás voy la próxima semana, en el trabajo me han dicho que me tome el tiempo que quiera pero ya en una semana salgo de vacaciones... me iba a ir a Ibiza ..." ¿y ahora que piensas hacer? preguntaba esperando algo mucho mejor que: "... Hmmm cambiaré de planes, creo... ¿no?..."
Mi cara de sorpresa mezclada con el shock de la noticia no me dejaba elaborar palabras sensatas... quería gritarle: ¡MADURA!, ¡CRECE!... ¡ENFRENTA! y a la vez sentía pena ¿cómo decir todo eso en un momento así? (¡Dios!, debí hacerlo).

Prometió mantenerme al día, promesa cumplida a duras penas... y mezcladas más por él interés de aquél por saber si yo ya estaba en otra historia o no, llevándonos a conversaciones bastante monosílabezcas que sólo giraban en torno a un "otro" que al tema de la salud de su madre...

La semana pasó y parte de mi pensamiento me decía: seguró cambió de planes, seguro se fue para allá... y con pocas señales (NULAS) de su parte.. por ya varios días decidí... LLAMAR... ¿en donde estás? .... ¡¡¡¡en IBIZA!!!!

No me sorprendió... pero vamos que me indignó.... ".. te hacía en sudáfrica..." ¡¡No!! mamá sigue viva y creo que seguirá bien por algún tiempo...

¿Me imaginan involucrada con un hombre de esta naturaleza? Si con casi 40 (en unos meses más) no lo puede enfrentar, ¡NUNCA lo enfrentará!. Es una lástima, pero debo reconocer que sí, ME EQUIVOQUE. Y lo puedo admitir con una sonrisa en los labios, por que hay cosas que de pronto DEJAN DE DOLER...

Espero que ella lo sepa comprender...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

pues q ejemplar este muchacho... :-s

Anónimo dijo...

Sindrome de Peter Pan... de hecho. De la que te libraste!
Una vez más, Dios te quiere mucho.

Rolando Escaró dijo...

no se si escribir pobre tipo o pobre de su madre...

creo que lo más triste es que ciertas cosas dejen de doler por esas razones, pero ni modo

Imberbe_Muchacho dijo...

las madres todo lo perdonan, no asi las novias o esposas

Pero es como deben ser las cosas

Tu al menos, la libraste

markín dijo...

Madurez? quién nos las da. Cada golpe , dicen.

Será un golpe el que le dejes de lado?

Quizá necesite algo más duro para saberse en las decisiones malas y buenas que tome.

la decisión de estar o no con él, es tuya, y la asumes en tu proipia madurez.

Cier la puerta, o ábrela.
Sea tu voluntad.

Chau.