Vivir con mi padre

A pesar de ser muy interesante, en muchos momentos llega a ser estresante, para que negarlo... ¿se imaginan, con una lengua imparable como la que llevo (y hablo estrictamente de mi verborrea siniestra); vivir con un hombre que difícilmente manifiesta sus sentimientos ... que difícilmente se sienta al lado tuyo y te comenta sus sueños cumplidos o no?

Vivir con mi padre no es, en todo caso; un eterno confesionario... es más, un eterno intento de búsqueda por la clave correcta de esa cerradura que envuelve sus labios (impenetrables) además, claro; de sus típicas manías... muchas, mejoradas con el tiempo (gracias a dios que dejó el cigarro). Felizmente hoy por hoy le dio por la música... vaya bendición... ojo, no quiero decir que la música estuvo antes "alejada" de su cotidiano andar... ¡FALSO! ... digamos que el cuarto de música de casa está repleto de discos compactos (muchos poco usados) todos comprados por él a través de los años...(ni siquiera los podría ennumerar).

Hoy por hoy me levanto con música a todo volúmen (actualmente "baglieto" ocupa los espacios sonoros de casa) con su máquina prendida desde muy temprano ... y con esa carita linda, tierna y curiosa que disfraza su hurañez con esa mueca que dice "no me jodas más"...

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Te quiero mucho y aunque lo quieras negar... sé que te gusta que te joda y joda con mis preguntas rebuscadas... (finalmente ... aunque renegando, es lindo verte tratando de responderlas)